Preguntado por Gamesindustry sobre si el conocer a fondo la arquitectura de la consola contribuye a mejorar la eficiencia a la hora de desarrollar un juego, el creador responde que lo lógico es pensar que si, "pero el problema es que un gran conocimiento conlleva una gran oportunidad, y ahí es donde radica tu problema" (en referencia a los desarrolladores).

Molyneux afirma que al conocer la GPU tan bien, ello te lleva a forzar al máximo el hardware: "Y eso es lo que hacemos. En la demo que he enseñado sobre Fable III, esos niveles son cuatro veces más grandes (que los de Fable 2), y tenemos una auténtica iluminación dinámica. Eso es algo que no hicimos antes, y si no lo hubiéramos llevado a cabo, nuestros problemas hubieran sido mucho más sencillos... pero nos obligamos a nosotros mismos a ir más lejos, y eso es lo que hacemos".
El directivo de Lionhead Studios termina aduciendo a que siguen experimentando con los límites de la consola: "aún estamos descubriendo los límites de 360 en cuanto a resolución gráfica. Aún continuamos inventando nuevas cosas".
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